Presentaciones de la cátedra de danza 2016


Integrantes:

Elenco Estable: Cristel Murillo, Diana Pérez, Ma José Jiménez, Verónica Díaz, Maripaz Moya,Valeria Moya, Yendri García, Valeria Sánchez, Mariel Villalobos, Karina Valverde, Valentina Ospina, Karen Medina,Raquel Calderón, Gabriella González, Ma Isabel Sandí.

Grupo de Belly Dance







Integrantes Belly Dance EMAI:


Cristina Echeverría Gonzales

Ingrith Cadet Fernández
Gabriela Gonzales Ciofoli
Elizabeth Iniciarte Cubillan
Larisa Hernández Jiménez
Fiorella Campos Hernández Jiménez
María Isabel Madrigal Roldan


Nivel Infantil y Adolescente: Natalie Mora, Juliana Suarez, Isabel Marín, Melanie Araya, Jimena Arias, Carolina Montero, Nicole Aguilar, Yamilet Ulloa, Samantha Kalkman, Natasha Monza, Isis Vallecillo, Tábata Marín.


Departamento de Danza


Se dice que el arte es el uso de la habilidad y la imaginación, para crear objetos, experiencias, melodías
o entornos con el fin de transmitir en algún grado el placer estético en el espectador. Tradicionalmente, hemos escuchado artistas afirmando que el arte alimenta el alma, y quienes realizan esta afirmación no se equivocan. Cuando vemos una obra de arte, nos sentimos conmovidos por ella, y podemos llegar a sentir que nos está transportando a otros lugares y tiempos, reales o imaginarios; el arte provoca reacciones emocionales. El arte expresa puntos de vista, críticas, sentimientos personales... y su percepción siempre será subjetiva.

En este sentido, empecemos a pensar en los beneficios que puede aportar el estudio de la música, las artes plásticas, la danza y el teatro como un todo. Cada uno de estos campos complementa al otro de distintas formas. La danza, que es en sí una técnica de control de movimientos, tiene como objetivo principal expresar las emociones del individuo a través del movimiento, para lo cual necesitamos sentir la música y el ritmo en nuestro cuerpo, así como necesitamos buscar motivaciones internas para expresar lo que sentimos. Carla Hannaford menciona en su libro "Aprender moviendo el cuerpo", que: "...si animamos a los niños y a nostros mismos a expresar las emociones de un modo humano, podremos relacionarnos con seguridad y honestidad. Para el aprendizaje es crucial esta relación segura... Reordemos que nuestro cuerpo piensa, hace y siente como una unidad y para que un pensamiento se afiance debe haber movimiento"... Si tomamos esta idea, vemos como los beneficios de aprender a bailar trascienden el ámbito físico y emocional. 

Las artes escénicas promueven el desarrollo social del individuo, ya que permiten la interacción con los demás de forma libre, espontánea y lúdica; lo cual, eventualmente nos enseña a observar y conocer mas sobre nosotros mismos y los demás, estimulando el desarrollo de las habilidades de convivencia. Por otro lado, está el beneficio afectivo, ya que el contacto consciente entre el cuerpo y las emociones nos vuelve mas sensibles a ellas y nos permite aprender a manejarlas. Por último, tenemos indudablemente el beneficio físico de la simple práctica de los ejercicios que comprende la danza como técnica artística. Asi, aunque no nos demos cuenta, el movimiento nos ayuda a pensar, de esta forma el desarrollo de las habilidades motoras que se impulsa dentro de la enseñanza de la danza en una comunidad nos da la oportunidad de reforzar, profundizar y comprender mejor los conocimientos que transmitimos a los niños y niñas en las escuelas y el hogar.

Los objetivos en nuestros talleres varían según la edad. Tenemos primero los talleres de Aprestamiento, dirigidos a niños y niñas en edad pre-escolar; en los cuales, se pretende estimular y mejorar las habilidades motoras y la coordinación de los niños mediante dinámicas y juegos que involucran ritmo y movimiento, así como su capacidad creativa innata. Todo esto con el fin de darles más seguridad y control de sus propios cuerpos y así contribuir positivamente con su autoestima y desarrollo personal.

También contamos con los talleres de danza creativa, para niñas, jóvenes y adultos en los que se busca continuar estimulando las capacidades creativas y la coordinación rítmica, al introducir la disciplina de la técnica de danza para lograr un mejor control del cuerpo. Cada grupo tiene un nivel acorde con las edades de sus integrantes. Este arte combina el desarrollo de las habilidades físicas con la capacidad expresiva de los estudiantes, lo cual promueve un mejor desempeño del individuo a todo nivel. Eventualmente, los estudiantes que cumplan el periodo básico y demuestren haber asimilado la técnica de danza apropiadamente, podrán optar por integrar los grupos mas avanzados donde se practica la danza coreográfica. En estos grupos se busca desarrollar el talento de cada estudiante, según sus capacidades y destrezas. En esta etapa el proceso es más personalizado y el objetivo principal es lograr la libre expresión de las ideas y sentimientos en plena libertad, tomando conciencia de la belleza e importancia de la vida misma.

Andrea Navarro Mata
Instructora y bailarina